24.3.08

25 MARZO. EXPÓSITOS


Se les privaba de un padre y de una madre. Y encima se lo recordaban de por vida. Para que no olvidaran se les colocaba el expósito de apellido. Así todo el mundo sabría que no procedían de alta cuna. Porque en Sevilla este tipo de cunas tenía y tiene nombre de calle.
25 de marzo de 1558. Un rincón entre las calles Goyeneta, Acetres y Cuna. Allí se fundaba el hospital de los niños abandonados o expósitos. Una institución que siempre tuvo demasiado movimiento. Así lo te lo cuenta Richard Ford en su “Manual para viajeros por Andalucía” escrito en 1830:
“Los que quieran cebarse en horrores pueden visitar el hospital de los expósitos, la cuna, que se llama en España, como si en efecto fuera la cuna y no el ataúd de los desgraciados niños. La cuna o casa de expósitos puede ser definida como el lugar donde los inocentes son asesinados y los hijos naturales abandonados por sus antinaturales padres, y atendidos en el sentido de que se les mata a hambre lenta. La cuna de Sevilla fue fundada por el clero de la Catedral y la administran doce directores, seis civiles, y seis canónigos, pocos lo frecuentan o le prestan ayuda, excepto aportando residentes...Un postigo, el torno, está practicado en la pared, y se abre con solo tocarlo, para recibir a los inocentes hijos del pecado; y una vigilante vela la noche entera para coger a los abandonados por padres que ocultan su culpa en la oscuridad... Algunos de los recién nacidos están ya moribundos y los traen aquí para evitarse el gasto del funeral, otros están casi desnudos, mientras que algunos aparecen bien provistos de ropas y cosas necesarias. Estos últimos son retoños de las clases altas y el motivo es ocultarlos temporalmente. En estos casos van también con ellos las cartas más emocionantes, pidiendo a los encargados que tengan más cuidado del normal con un niño que, sin duda, será reclamado en su día...Todos los detalles correspondientes a cada niño expósito se apuntan en un libro, triste registro del delito y del remordimiento humano. Los niños que luego son reclamados pagan dos reales por cada día que el hospital les ha mantenido...A menos que vaya un nombre con el niño, éste es bautizado con el que le da la directora y que suele ser el del santo del día de su llegada. El número de esos niños es muy grande y aumenta rápidamente con la creciente pobreza, mientras que el dinero destinado a sustentarles disminuye por la misma razón...”
Has cerrado tu libro. Has recordado que el número de niños aumentaba nueve meses después de Semana Santa o de Navidad. Niños expósitos. No los olvidarás cuando pases por la calle Cuna. Hijos de malos padres. Siempre existieron. No siempre cualquier tiempo pasado fue mejor...

9 comentarios:

Reyes dijo...

Que pena...
La calle Cuna ya no la podré recorrer sin recordar tu historia.
Que lástima de chiquillos, que pena.

el aguaó dijo...

Sabía que la calle Cuna tenía ese nombre por la casa que antaño allí se encontraba. Sin embargo, no conocía la descripción que has transcrito textualmente.

Una vez más, gracias, querido amigo.

Me alegro de tu vuelta.

Un fuerte abrazo.

P.D. Te busqué bajo tu antifaz en la calle Feria...

J. Iván Martín dijo...

A mi mepasa lo mismo que al amigo aguaó, conocia que el nombre de la calle era por el orfanato que alli existia pero no conocia los horrores que habia en el...

Cuando visité las excavaciones del Salvador me contaron que en una de las antigua capillas habian encontrado centenares de huesos de niños y que en el techo de esta habia un hueco por el que tiraban a los niños fallecidos en la casa cuna...

Un abrazo y me alegro de tu vuelta.

Herodes Antipas dijo...

Me parece acertadísimo tu texto, y me has recordado el porqué del nombre de la calle. La verdad es que por el entorno de la Encarnación, aparte de Cuna, también está la calle Amparo, antigua de los Viejos, que también tiene su historia...
Un saludo

Anónimo dijo...

Buenas.

Aunque yo no tengo el apellido de Expósito en mi familia hay un caso de este tipo. Me explico: El abuelo de mi madre fué un niño nacido de una pareja de novios de la nobleza sevillana, o sea no estaban casados. Mi bisabuelo fué cuidado y criado por una pareja de guardeses que vivían en la Calle Ancha de San Bernardo a la espera que la pareja se casara. Todo el barrio sabía eso porque, a menudo, se oía el ruido de la berlina que llegaba para traer viandas al niño.
Cuando la parejita se casó volvieron al barrio pero mi bisabuelo dijo que nones, que se quedaba con los guardeses.
Y aunque mi segundo apellido no es nobiliario todos los que lo llevan son de mi familia porque realmente es un nombre, un poco rancio, que se adaptó para darle al niño un apellido.

Es esta una historia de expósitos pero feliz. Aunque por supuesto no soy terrateniente ni maestrante jejeje.

Perdón por la extensión.

Uno de San Bernardo.

Anónimo dijo...

quiero agradecerles que me den la oportunidad de hacer un comentario referente a la casa cuna.mi abuelo fue llevado a ella por una mujer de la nobleza sevillana,por aquel entonces para tapar "la honra",lo metieron en el torno...y si te he visto no me acuerdo.salió de alli siendo un chaval y lo recojió para trabajar la familia de mi abuela de la que mas tarde se enamoró y se casaron,al principio teniamos curiosidad por saber de que familia podría venir pero al final hemos entendido que si esa mujer de "la nobleza"en su día lo dejó allí sería porque le importaba más el que diran que su hijo.seguramente tenga familia allí pero no me importa en absoluto ya que para mi son escoria.acepto que una madre sin recursos entregue a su hijo para augurarle una vida mejor pero no entiendo como siendo una niñita de bien ,pudo hacerlo.en fin ya me he desahogado.despues de todo no han pasado tantos años ya que yo tengo 38,mi madre 77 y siempre le quedará la duda de saber quienes fueron sus abuelos paternos.

Anónimo dijo...

El comentario de Ford es el típico de esos viajeros románticos que venían a España a encontrar un país exótico. Y les daba igual lo que vieran porque ellos ya tenían su idea preconcebida. Venían a ver un país semisalvaje y moro y solo veían moros y un país semisalvaje. En resumen que la visión de Ford es sesgada, una de las que crearon la sarta de tópicos insufribles que aun soportamos.

Pero lo más grotesco es esa especie de "superioridad" con la que se critica el apellido Expósito, las casas cuna, etc. en una época en la que se aseina legalmente a más de 100.000 niños al año en el vientre de sus madres. Es como sí un nazi mientras activa el horno crematorio se horrorizara por ver que un padre le da una bofetada a su hijo porque ha dicho una palabrota...

anagasto dijo...

El padre de Antonio Machado hizo una colección de cantes donde encontré:
Tiene'r corasón más negro
qu'er cuerbo tiene la pluma;
que a un hijito e tus entrañas
l'has tiraíyo a la Cuna.

Y me ha costado más de una hora encontrar este blog que explica el significado de "cuna".
Muchas gracias!

M. Dolz dijo...

Mi bisabuela fue abandonada en la Casa Cuna en 1885, la "adoptó" una familia, pero sufrió toda la vida el estigma de ser "cunera". Era muy duro, la sociedad de la época las consideraba poco menos que prostitutas. Cuando lees el libro de ingresos de ese año, se te cae el alma a los pies, la mayoría de los niños moría a los pocos días de llegar a la Casa Cuna, cualquier brote de gripe, difteria...se llevaba casi al 80 por ciento de los bebés en un abrir y cerrar de ojos. Y les faltaba lo principal, una mamá que los acunara y los besara.