17.12.07

18 DE DICIEMBRE. LA VIRGEN


Sin hacer ruido, un año más, ha llegado tu día. Me he acercado a tu casa para besarte y, un año más, me quedé sin palabras. Mirarte a la cara me costó; fue todo un esfuerzo, pero al mismo tiempo no supe otra hacer otra cosa. Confianza. Ya sé que tu cara me acompañará el miércoles, y el jueves, y el resto del año...
Un año más, no sabría decir cuál es tu edad. Alguien me contó que andabas por los diecinueve pero en tus ojos hay mucho tiempo, mucha alegrías y muchas penas, pero sobre todo muchas esperanzas. Esperanza de siglos.
Creo que llegaste a esta, tu tierra, en los años finales del siglo XVII, aunque en eso nadie se pone de acuerdo. Unos dicen que naciste de manos de una mujer, otros que de un artista desconocido, otros que de unas manos triunfadoras. La cuestión es que te fuiste a vivir cerca de la antigua muralla, entre huertas y gentes sencillas que vieron en ti un motivo para seguir existiendo. Llegaste y te pusieron un nombre antiguo. El nombre de los salmos que se rezaban en la catedral de Toledo para anunciar la llegada del Niño Jesús. O Sabiduría, O Vara de David, O Enmanuel, O Esperanza Nuestra. Aunque tanto te identificaste con tu barrio que, al final, os transformasteis en la misma cosa.
He vuelto a comprender por qué te quisiste transformar en madera. Madera en el rostro, madera en las manos y un simple candelero para que tus devotos te vistieran de Reina en las alegrías y de mujer de Jerusalén en las Penas, que de todo has vivido. Mirándote a los ojos he sentido que las cosas importantes no se pueden explicar, que todo en la vida tiene muchos matices. No he sabido si ríes o si lloras, si levantas una ceja o es que relajas la otras, si tus lágrimas terminan o empiezan. Alguien me dijo que la fe era creer en tanta belleza. Y puede que no le faltara razón....
Sentado en tu casa, llena de invitados, como siempre, he recordado muchas historias que alguna vez se inventaron en tu barrio de la Feria: que si te quisieron cambiar por un reloj, que si un borracho te tiró un caso de vino, que si te quisieron vestir de republicana en 1873... Pero tú sabes que haz vivido historias que no son invenciones: todavía recuerdas cuando te metieron en un cajón de madera para huir del maltrato de la incultura; y tu escondite en un refugio, envuelta en sábanas mientras tus hijos se mataban unos a otros. Tampoco olvidarás cuando murió aquel torero que tanto te quiso y te vistieron de negro, un luto que te recordó la muerte de la Jerusalén de hace dos mil años...
La vida es así. Hoy y mañana, el día y la noche, la alegría y la pena. Por eso también has conocido glorias, y coronas y pregones, y sobre todo confesiones de tu gente. La gente que hoy, entre verdes, bordados, risas y llantos comenzamos a vivir un tiempo de espera. Es en San Gil. Un lugar en el mundo donde comprender aquello de que la Esperanza es el sueño de los que están despiertos...

9 comentarios:

Rascaviejas dijo...

Disculpen cierta repetición temática pero alguien me lo pidió...

bogar dijo...

LA ESPERANZA es el sueño de los que estan despiertos.Muy bonito maestro,pensé que era imposible superarse pero si.Saludos

Reyes dijo...

Pero como Ella, ninguna.
Un año más, lo corroboro.

Anónimo dijo...

Por Dios, ¿qué es lo que hay que disculpar?. Llevo cuatro días con la lágrima fácil, acabo de leer su texto y me he venido abajo.

No tengo palabras, precioso.

Ella, Ella me descoloca, me desmonta y me hace sentir al mismo tiempo insignificante como un grano de arena y grande como una montaña. Me tiemblan las piernas cuando voy caminando hasta sus plantas, no sé; es algo distinto a todo.

De nuevo, enhorabuena por sus letras.

"Sigo soñando despierto", y quisiera despertar del sueño el 21 de Marzo al alba, justo cuando la Esperanza nos entregue la Primavera por la calle Cuna.

Fdo.- Orfila.

Diego Romero dijo...

No se disculpe usted por hablar repetidamente de la Esperanza; sin Ella no seriamos nada.

Sonríes de madrugada
cual rosa recién regada
por un arco de esplendor,
y lloras por la mañana
cuando en Feria una ventana
éste año no se abrió.

Lloras en el alba claro
que el sol recién estrenado
te da por la Encarnación,
y sonríes por Santa Ángela
al llegar llena de gracia
ante las hijas de Dios.

Ríes y lloras cada día
en las soledades frías
de quien reza tras de Ti,
en espejos de armonía
de perfiles de María
sin saber cual elegir.

el aguaó dijo...

Eres un crack amigo. Poco más puedo decir.

La repetición es Divina.

Un fuerte abrazo.

Enrique Henares dijo...

Vaya texto de categoría le ha salido a usted, querido amigo...

Ranzzionger dijo...

La Esperanza no es repetitiva, y por eso se ancla a aquellos que nos acercamos a ella y que, al contemplarla, nos quedamos arrobados por tanta belleza. Magnífico texto, uno más.

J. Iván Martín dijo...

No se disculpe por haber repetido el tema, se ha superado señor rascaviejas.

Gracias por recordarnos que en estas fechas debemos estar llenos de esperanza y alegria...Muchas gracias de nuevo...

Un fuerte abrazo