25.2.09

26 DE FEBRERO. LA BODA

Aunque era un hombre tranquilo, aquella mañana Bartolomé se despertó algo inquieto. Ya no era un muchacho y su futuro parecía ya asentado entre sus principales clientes de la ciudad. Eso pensó al cuidar su aseo para la ocasión: jubón nuevo, camisa blanca y calzas de gala. Buen paño para la cita, quizás uno de los mejores regalos que había recibido. Delante del espejo le dio por pensar en el futuro mientras cortaba con esmero su perilla y su bigote. Imaginó triunfos y reconocimientos, pero, sobre todo, pensó en su obra. Y pasaron por su mente colores, encuadres, texturas, composiciones, personajes, historias. Transmitir sensaciones, emocionar, hacer sentir, motivar a la oración, hacer creer, dar motivos para vivir a unos sevillanos que vivían en la pobreza y en la miseria. En el fondo la suya era la más hermosa de las profesiones. Y, por qué no, su ciudad merecía alguien que reflejara su belleza. Una idea que le vino a la mente mientras acababa de vestirse.
No sabía por qué, pero en aquel momento se le vino a la mente aquella aventura que quiso tener con quince años, cuando pensó en irse a las Américas. Quizás su vida hubiera sido otra.
- Una chiquillería -pensó camino de la vieja iglesia de la Magdalena. Ahora, con veintisiete años veía la vida de otra manera... Sobre todo enmarcada en juegos de diagonales, de perspectivas, de iconografías y de calidades. La suya era una edad para no andarse con tonterías. Por eso le insistieron tanto y, quizás por eso, aceptó el acontecimiento.
Llegó con tiempo a la iglesia. Tiempo para seguir pensando. Y, en medio de amistades y familiares, vio llegar a Beatriz. Sería el día o sería la ocasión. Sería el ambiente, qué sabía él... pero aquel día la contempló de otra manera. Quizás la fuerza de la costumbre y los años viéndola en la casa de su tío Tomás el platero le habían quitado perspectiva y enfoque. No podía evitarlo: el lenguaje de los pinceles quizás fuera el que mejor manejaba...pero delante del altar mayor y entre las oscuras capilla de la Magdalena Bartolomé creyó descubrir una nueva luz. Interior, como las de los buenos cuadros. Una belleza plena, como la de las obras bien terminadas. Y, sobre todo, una esperanza en un vida común. Cuando entregó anillos y pronunció las palabras de consentimiento, su imaginación voló llena de libertad. Se sumergió en un mundo de niños que juegan y de mayores jugando a ser niños, de celestes purísimos y de blancos inmaculados, de hogares y de callejones, de pícaros y de angelitos, de santos y de putas asomadas por las ventanas. Un mundo lleno de sonrisas, de ideales y de belleza. Tenía que existir. Como la fantasía. Si no, habría que crearlo.
26 de febrero de 1645. Campanas de boda. Un pintor llamado Bartolomé Esteban Murillo imaginó un mundo feliz.

22.2.09

22 DE FEBRERO. ITÁLICA SEGÚN THÉOPHILE GAUTIER (1845)


“Un puente de barcos une las dos orillas y pone en comunicación los arrabales de la ciudad. Por aquí es por donde se pasa para visitar, cerca de Santi-Ponce, los restos de Itálica, patria del poeta Silio Itálico, de los emperadores Trajano, Adriano y Teodosio. Se ven allí las ruinas de un circo, que conservan bastante claramente su forma. Las fosas donde eran encerradas las fieras, las celdas de los gladiadores, son perfectamente reconocibles, así como los corredores y las gradas. Todo esto está construido con guijarros dentro de la masa. Los revestimientos de piedra han sido probablemente arrancados para servir a construcciones más modernas, porque Itálica ha sido durante mucho tiempo la cantera de Sevilla. Algunas habitaciones han sido descombradas y sirven de asilo, durante las horas de más calor, a unos rebaños de cerdos de color oscuro que gruñiendo se ponen a salvo entre las piernas de los visitantes, y son hoy la única población de la antigua ciudad romana. El vestigio más entero y más interesante que queda de todo este esplendor desaparecido es un mosaico de gran dimensión que han rodeado con muros y que representa musas y nereidas. Cuando se reaviva con agua, sus colores aparecen aún brillantes, aunque por codicia se la hayan arrancado las piedras más preciosas. También se han encontrado, entre los escombros, algunos fragmentos de estatuas de un estilo bastante bueno, y nadie duda de que unas excavaciones hábilmente dirigidas no dejarían de aportar descubrimientos importantes. Itálica está aproximadamente a legua y media de Sevilla, y, en calesa es una excursión que se puede hacer muy fácilmente en una tarde, a manos que no sea un anticuario apasionado, y que se quiera mirar una por una todas las viejas piedras en las que se sospecha que pueda haber una inscripción”.

19.2.09

19 DE FEBRERO. LA CONDESA DE LEBRIJA

Se llamaba Regla Manjón y Mergelina, y había nacido en Sanlúcar de Barrameda allá por el año 1851. Vivió en Sevilla desde muy joven. Se casó, también muy joven, con Federico Sánchez Bedoya, que llegaría a ser con el tiempo vicepresidente del gobierno. Quedó viuda pronto, volcándose en su pasión: las antigüedades. Pero su nombre va unido a un lugar. Su casa en la calle Cuna: la Casa de la Condesa de Lebrija.
Entras allí y, entre columnas, azulejos y obras de arte, ves el mejor mosaico romano de la ciudad. Cierras los ojos y retrocedes en el tiempo. Y llegas a escuchar las palabras de Doña Regla:
“Tienen las casas fisonomía. Tienen las casas alma. Tienen algo indefinible, nacido de una idea o de un sentimiento. Tienen algunas el incomparable sello de una época. Casas hay que ríen. Otras que, como las cosas de que habla el poeta latino, tienen lágrimas...”.
Hablaba la condesa de una casa en la que volcó su vida. En su interior resuena el eco de sus palabras: “Mi casa es abreviado compendio donde toda mi vida se ha condensado. Ella es el relicario donde he guardado las venerables memorias de mis abuelos, los sagrados objetos de mis llorados muertos, las lujosas preseas de mi juventud, los fúnebres crespones de mi luto y los artísticos tesoros durante toda mi vida acumulados”.
Andas por sus habitaciones y pisas la Roma clásica: mosaicos, Dioses, emperadores, lucernarios, ánforas, columnas, esculturas... Tantas cosas que parece que la condesa no se dedicó a nada más. Pero su vida fue apasionante. Fue la primera mujer elegida como académica de Bellas Artes, formó parte desde 1922 de la Comisión Provincial de Monumentos y llegó a ser hija adoptiva y predilecta de la ciudad por sus labores caritativas. Junto a su pasión por la arqueología, doña Regla trabajó por los niños abandonados y participó en la Junta de la lucha antituberculosis. Andas por su palacio de la calle Cuna y aquello te parece un tiempo pasado. Recuerdas algo curioso. Cuando doña Regla quería un mosaico llegaba a comprar la finca donde estuviera para poder llevarlo a su casa y conservarlo. Incluso adaptaba la forma de la habitación a los mosaicos romanos.
Sales a la calle y te das cuenta de que vives en otro tiempo. Los incultos de ahora encuentran mosaicos en la Encarnación y se dedican a destrozarlos. En vez de cuidar los restos romanos, les colocan una grúa y máquinas pesadas encima. En vez de adaptar su casa, como Doña Regla, adaptan los restos de la historia a sus sueños de grandeza, a su cortedad mental.
En la calle Cuna moría la condesa un día como hoy de 1938. Allí está la historia tratada con mimo; en la plaza de la Encarnación la historia simplemente se destroza. Así nos va...

16.2.09

17 DE FEBRERO. SUPERSTICIÓN AMARILLA

-¿Queréis café?.
Doña Engracia, la vecina del segundo, ya muy mayor, había fallecido. En el bloque todos sabían que tenía “una cosa mala”.
-¿Queréis café?-repitió cual interrogación retórica María Dolores de la Santísima Trinidad.
La fatalidad de una inoportuna huelga de los servicios funerarios hizo que se velara el cadáver en su domicilio y que las vecinas acompañaran desde el atardecer a la difunta. La Esperanza los desesperó, La Nueva les sonó a antediluviana y en El Ocaso se acordaron, con perdón, de los muertos de alguien.
La pobre, si no tenía a nadie.... Por lo menos se había librado de acabar en la residencia que pretendían las víboras de sus nueras... Loli, solícita y servicial, y por el cariño que profesaba hacia la anciana vecinita del bloque, tomó las riendas.
-Ahora os traigo un termo y unos pestiñitos.
También fue mala suerte la dichosa huelga y que la única ferretería de los alrededores fuese cerrada el mes anterior para poner un chino. De La Bellota al Gran Bazar de Oriente. Ya nada era lo mismo...
- Paco, pos llégate al Leroimerlin que cierra a las diez, ya sabes que no podemos defraudarla, soy muy supersticiosa y como no lo hagamos no volveré a pegar ojo, sabes que dijo que se nos aparecería de noche si no lo hacíamos-
Loli no soportaba ver la sal vertida. Cuando caía en la mesa recogía el hule y el duralex mientras hacía pequeñas bendiciones salinas sobre su paletilla izquierda y sobre su paletilla derecha. Ni pasar bajo una escalera, ni cruzarse con un gato negro, ni unas tijeras abiertas. Menos mal que con la edad había conseguido sobreponerse a esos ridículos saltos que daba para evitar las losetillas de diferente color en la calle. Mejor imposible...en sevillano.
- ¿Paco? ¿Has vuelto? ¿Traes el martillo y el cincel?-
- Sí, Loli.
María Dolores de la Santísima Trinidad metió en la caja los instrumentos que su vecina le pidió para elcaso de que la enterraran de muerte aparente. Temor eterno a ser enterrada viva. Una lectura de Poe en la infancia que traumatizó a una afable ancianita hasta el fin de sus días.
-¿Y sabes una cosa, Loli? Este niqui amarillo ya no me lo vuelvo a poner más, ¿sabes?.
- Te lo tengo dicho, no hay campo sin grillo ni hortera sin amarillo. Pero, ¿no será que tú también tas vuerto supersticioso Paco?-
- No, joé, es que vengo comío de mosquitos.
Ocurrió un día de febrero. Muchos años antes, allá por 1673 moría sobre las tablas de un teatro Jean Baptiste Poquelin, conocido como Moliére. Vestía de amarillo. Nacía una superstición.
En Sevilla siempre gustó mucho el teatro...

13.2.09

14 DE FEBRERO. DECLARACIÓN


O sí... Por los años que hemos compartido. Por los que nos quedan. Por tu historia. Por la nuestra. Por la de los nuestros y la de los demás, que también somos nosotros. Un todo. Orgía de vecinos. Porque resurges de tus cenizas. Ave fénix. Polvo, poca corrupción, algunos gusanos rastreros y ceniza. Más tendrán sentido. Polvo serás, más polvo enamorado. De viejas historia y de viejos anhelos. De proyectos por hacer. De rincones por habitar y donde volver a copular con los placeres que sostienen cualquier existencia... Por tantas cosas. Por tu piel y por la mirada altiva de tu torre, por tus poros y por el aguante de tu semblante eterno de mujer madura. Con el paso del tiempo a tus espaldas. Con el peso de los que te maltrataron, de los que desfiguraron y de los que criticaron a tus hijos. Hijos arrebatados que hasta conocieron el destierro de la distancia. La nostalgia los hizo fuertes. Por eso te recordaron con la belleza de la melancolía del recuerdo. Hijos de la mejor amante. A la que se quiere siempre. Siempre deseada y siempre apetecible. No importa el paso del tiempo. No importa que te afrenten o te desfiguren, que te maldigan o que renieguen de ti. Hay en un rincón del mundo alguien que te sigue deseando con ojos de amante neófito. De juventud llena de eternidad. Pactada con diablos que se aliaron con la hermosura. Por eso sigo queriendo fundirme y perderme por cada uno de tus rincones. Romanos, moros, renacentistas, barrocos, costumbristas... Todos son románticos. Todos apetecibles. Todos cargados de belleza... Quizás no sepa explicarlo. Pero tengo mis razones. Declaración de grandezas en día de superficialidades. Quizás cualquier día sea bueno...
No me cabe duda: me sobran los motivos.

12.2.09

13 DE FEBRERO. LOS CAÑOS


“¿Qué se puede esperar de un lugar cuyos planos colocan el sur al este y el norte al oeste?”.
Más o menos así se criticaba a tu ciudad en una película de hace algunos años. Sevilla, ciudad ignorante hasta en su planos. Ciudad donde nadie conoce a nadie. O todos lo saben todo, quien sabe... No sabes por qué pero un día como hoy, 13 de febrero, te ha dado por pensar en estas cosas. O sí lo sabes. Leías un libro buscando la fecha del día y te encontrabas con un efeméride curiosa. Te hablaba de los caños de Carmona en estos términos:
“Había fuera de la Puerta de Carmona, en el llano, sobre el camino que conduce a Carmona, huellas antiguas que se habían cubierto de la construcción de una acequia. La tierra se elevaba sobre ella y había en la tierra una línea de piedra cuyo significado se desconocía. Fue a ella el ingeniero y cavó alrededor de los vestigios mencionados, y he aquí que apareció la traza de un acueducto por el que se conducía agua antiguamente a Sevilla, obra de los primeros reyes de los romanos, de épocas pasadas, de gentes desaparecidas, de siglos anteriores. No cesó el ingeniero Yaçis de seguir la excavación con los mineros y obreros y con los cientos de hombres y trabajadores que iban con él, hasta que la excavación lo condujo hasta la fuente llamada entre la gentes de Sevilla y su región Fuente de al-Gabar, nombre que tuvo en los tiempos pasados. Y he aquí que el agua de esta fuente no era de manantial sino que era de un sitio que se había abierto en el trayecto de un acueducto antiguo. El agua se cortó para la gente al llegar la excavación al sitio indicado y conoció con esto Yaçis que había encontrado el acueducto; y continuó los trabajos hasta que encontró la toma de agua del río en las cercanías del castillo de Yabir (Alcalá de Guadaira)”.
Paraste tu lectura y te dio por pensar. Cosas de tu ciudad...De nuevo en la lectura supiste que los Caños de Carmona surgían de la ladera de una pequeña loma en la que está situada Alcalá de Guadaira. También aprendiste que los Caños de Carmona, primitivamente romanos, fueron rehechos por los almohades y que el califa Abu Yacub Yusuf los finalizó en 1172. Un día 13 de febrero de hace ya muchos años llegaba el agua a Sevilla...
De nuevo te dio por pensar. Recordaste aquello del sur en el este y el norte en el oeste. También que los Caños de Carmona, todo un monumento en cualquier lugar del mundo, se caen llenos de mierda en la calle Luis Montoto. No sabes por qué, pero pensaste en el grupo Los Caños y hasta en Andy y Lucas. Niña, tutuá tutuá. Texto para comprensión de informe educativo.
Total: ¿Qué se puede esperar de una ciudad que llama Caños de Carmona a un acueducto que viene de Alcalá?

9.2.09

10 DE FEBRERO. GANDÍA

Querido Paco:
Vaya faena la tuya. Ni las de tu Curro Romero, vamos. Dejarnos así, sin avisar, para irte tan lejos, allá en lo alto. Que yo sé que para ti, pasar de Despeñaperros era algo así como irse a Alemania...
Porque no hace tanto que naciste. Fue allá por 1929, un año en el Sevilla se mostraba al mundo en su Exposición Iberoamericana. Quizás no mostrara otra Sevilla, la auténtica que tú viviste junto a la calle Viriato, la de los corrales, la de las hambres, la de los libros del Desván de tu amigo Luis, la de los garbanzos de la Bañeza... Tu vida, como la de tanta gente, fue un continuo trabajar de aquí para allá, en miles de empleos a los que llevabas tu hiperbólica figura.
- ¿Hiper qué?
Hiperbólica Paco, o sea, exagerá como tú mismo. Porque todo en tu vida fue digno de exageración: tu figura, el tinte de tus canas, tus comparaciones, la duración de tus chistes... y, sobre todo, tu exagerado corazón. Casi no cabía en la chaqueta azul marino de Jueves Santo y de tu Virgen de los Ángeles...
Viviste Paco en una época de cambios: la Transición, el paro, el divorcio, el destape... Una época quizás algo cutre, pero a la que añadiste la gracia de tu persona. Llegabas a un bautizo, a una boda o a una sala de fiestas y todo parecía cambiar con tu humor, el humor de las sobremesas sevillanas de hace muchos años. Sin ofender, sin insultar. Sólo contando casos verídicos, tan falsos y tan reales como la vida misma.
Quién te lo iba a decir... Te descubrieron en un programa de televisión de José María Iñigo, un tío con bigotes al que seguro que le hiciste una comparación. Nuevos talentos, tú que estabas a vueltas de casi todo. Junto a Miguel Bosé, allí estaba Francisco González Gandía, más conocido como Paco. Y hablaste de garbanzos, por supuesto. Y aunque Madrid estaba más allá de Despeñaperros, triunfaste. Desde entonces no hubo gala donde no estuviera Gandía. Incluso apareciste por el cine haciendo de parado en movimiento, o de alegre bribón, o de compañero de un Pepe Da Rosa al que se le acababa el petróleo...
Tú no lo sabes Paco, pero fuiste todo un creador. Nadie dirá cómo tú aquello de er niño se quedó afulgarao, a nadie le subirán los trompos como a tu Julito viendo a Curro Romero, a nadie se le olvidará tu chiste del entierro cuando vaya camino de San Fernando.
El 10 de febrero de 2005 nos dijiste adiós. Un adiós que nos dejó algo fríos. Más fríos que la medalla de Drácula, que dirías tú.... Y te quedarías tan serio. Porque la vida era algo serio. No te perdonamos la faena de irte. Justo el año del centenario de tu equipo, si hubieras sabido que lo mejor estaba por llegar... Se fue la gracia y se quedaron los graciosos. Sólo tienes una forma de que conseguir nuestro perdón. Será si nos esperas más allá de Despeñaperros y nos recibes diciéndonos aquello de“le voy a contar un caso verídico...”.

UNA RECOMENDACIÓN: LA ALAMERDA

Pueden leer el texto en el siguiente enlace:
http://ranzzionger-pondeto.blogspot.com/2009/02/alamerda.html

8.2.09

INVITACIÓN: 11 FEBRERO. EL ALMANAQUE EN EL ATENEO DE SEVILLA


Ateneo de Sevilla, calle Orfila, 6 de la tarde. Dentro de la programación del curso de "Temas sevillanos", presentación de "Almanaque de Sevilla", un recorrido por la historia de este libro y de este blog, con lectura de alguna de sus páginas y con la posiblidad de charlar y debatir sobre las historias de cada una de las páginas de este rincón. Quedan invitados.

6.2.09

7 DE FEBRERO. EL COLECCIONISTA

(Foto: Antonio Sánchez)
Colecciones habría pero como la suya ¡ninguna!...
Era la frase que más le gustaba repetir, especialmente con aquellos que él consideraba como entendidos, los dignos de conocer aquella paciente labor de años. Casi todo, por no caer en la pedantería del “Todo, sobre la Semana Santa” se encontraba allí. ¿El dato?. Allí estaba, y bien catalogado. ¿La fecha? No había año que no estuviera anotado. ¿La imagen? Probablemente no le quedaba ninguna por recoger, eso sí, bien ordenadas y catalogadas por días de la única Semana.
Hubo días en los llegó a perder la noción del tiempo. En su habitáculo se condensaba todo lo que había que saber, todo lo que había que oír y todo lo que había que guardar. Las efemérides no tenían secreto para él. Ordenadas por años, recopiladas en libros y en discos compactos, memorizadas como una letanía continua, como las cuentas de un rosario eterno. Vivencias ordenadas en cientos de cintas que sabría repetir de memoria, sonidos acumulados en cintas, cedés y una nueva joya conocida como MP3. Parecía un sueño. Miles de sonidos en la palma de la mano, ordenados por bandas, agrupaciones y tríos de capilla. El trabajo de años, el trabajo de toda una vida...
Por eso hacía años que era una persona imprescindible. No había nadie que supiera como él. Se hizo omnipresente: charlas, debates, ponencias, conferencias... Si no contaban con él algo fallaba. Y por eso su colección se engrandeció con placas, recuerdos, medallas y pergaminos que indicaban su erudición.
Un mal día la desgracia llegó a su casa. Nunca se pudo explicar cómo pudo pasar. Aquellos ladrones debían tenerlo bien preparado. Porque al volver a su casa después de una conferencia halló su colección vacía. Expoliada. La ausencia. Buscó en todos los rincones y le pareció no encontrar nada. Cansado, cayó al suelo y en un rincón creyó descubrir algo. Estaban allí... escondidos... Se llamaban sentimientos.
Aquel día el coleccionista descubrió la Semana Santa...

5.2.09

4 DE FEBRERO. LA CRUZ Y LA CALAVERA

Domus pauperum, scala coeli. Azulejos que te recuerdan en Sevilla el lugar en el que está la escalera hacia el cielo. Junto al río, en la casa llamada Hospital de la Caridad. Otros azulejos te recuerdan el lugar de acogida para mujeres enfermas e impedidas. Quizás no sean la escalera hacia el cielo. No hace falta escala... Está tan cerca...
Venera de Sevilla. Plaza con pozo y Virgen milagrosa que salvaba a los niños ahogados. Pasas bajo una puerta símbolo del Barroco: una cruz desnuda, la calavera y la serpiente. Vanitas mundi. La cruz de Cristo y la calavera del primer hombre. Todo un símbolo. Sevilla teatral y dual. Como la iglesia. Se llama del Varón de Dolores y se traduce como el Pozosanto... Una iglesia espectacular: retablos, pinturas, velas, teatralidad... Un retablo mayor del siglo XVIII en color de madera natural que cobija una de las mejores imágenes del siglo XVII: Cristo Varón de Dolores. Una iconografía propia de otros tiempos, Cristo desnudo vence a la Muerte con el símbolo de la Cruz, una obra muy cercana al escultor Pedro Roldán que no deja de impresionarte. Sol en tu imaginación. Una cueva de estípites de madera envuelve al Cristo que pisa la calavera. Mors morte superavit. Canina reducida a la mínima expresión. Triunfó el bien y triunfó la belleza. Sin dorados. Recuerdos de esa Virgen de agosto que dormirá a los pies del retablo. Tránsito hacia una vida mejor de una mujer que duerme pero que no muere. Caravaggio frente a José Gestoso. Dormitio o koimesis bizantina. Asunción de la Virgen que dirían los Papas. Y una iglesia llena de obras de arte. Se inauguró tal día como hoy de 1682. Un marco que cobijaría la alegría de sus dos fundadoras, Marta de Jesús (1590-1669) y Beatriz Jerónima de la Concepción, las dos monjas fundadoras del hospital del Pozo Santo. Mucho más que una iglesia: hospital, acogida, residencia, ancianas felices, patio toscano, museo, cuadros de ángeles, Virgen del Tránsito, Niño Jesús en fanal, Virgen de Trápani, cuadro de la epidemia de peste de 1649, crucificados barrocos, blancura de los muros, mirador en altura, azulejos sevillanos, mármoles italianos, tradición, leyenda, realidad, mirada al futuro... La visita al Hospital del Pozo Santo te parece un tránsito hacia otro mundo, un isla de silencios y atenciones en medio del escándalo y de los escándalos de nuestro tiempo... La pobreza y el pecado están superados. Por unas benditas locas del amor a Cristo y a los pobres vestidas de blanco. Por una cruz que triunfa sobre una calavera. La dejas que corone tu cabeza al pasar por la puerta. De un lugar céntrico de Sevilla.
Hospital del Pozo Santo. El cielo se puede tocar.

2.2.09

2 DE DE FEBRERO. REBAJAS

Cansancio tras dos eternas noches de preparación. Ofertas, tendencias, colores, conjuntos, moda... Tras el cansancio, la venta. Todos en sus puestos. Trajes impecables y sonrisa estudiada. Allí surgió la sorpresa. Un dependiente gris se subía a la base de un maniquí, carraspeaba y declamaba:
“¡Sevillanos! Ni metrosexual, ni ubesersexual, ni nerg, ni JASP, ni el "vintage", ni los zapatos "customizados", ni modas "cool" o "in", ni zonas "hot", ni pollas en vinagre... ¡Ha nacido el ranciosexual CASP! Identifíquenlo:
¡Calzoncillos tipo Homer Simpson!, ¡como Dios manda! Blancos para autentificarlos con su manchita o bien beige. Nada de slip, ni de boxer ni de mariconadas. ¡Braslip de toda la vida
- ¡Camiseta de tirantas! Blanca, celeste o amarillenta dudosa, modelo glorioso si es con agujeritos que permitan ver la recia pelambrera pectoral.
- ¡Camisa blanca o crema!... dudosamente transparente. Permite ver la camiseta interior. Ay, cómo pasa el tiempo en sus cuellos...
-¡Pantalón gris marengo!... para asistir a las funciones... principales de instituto.
- ¡Zapato! "de material" modelo calle Córdoba año 83, con borlita decorativa que no acaba de caerse y falta notoria del Kanfort en casa.
- Corbata cuidadosamente deteriorada en los alrededores de un nudo flojingango, con una tonalidad azul en la que aparecen escudos universitarios de la promoción 81-86 o la inevitable insignia patria
- Blazier azul heredado del hermano mayor, con botonadura años 80 de las últimas rebajas de Cañete.
- ¡Chaleco de pico!, perdón, "niqui" en tonos amarillos si el día va festivo o en los plausible tonos grises de un sevillano que se precie.
-Pin y plisacorbatas neobarroco merecidamente ganado en la última conferencia dada en el prestigioso curso de Temas Ultrasevillanos.
- Fijador marca "Guadiana" sobre un pelo con tendencia a la producción de mansa y copiosa nieve que gusta de las alturas del blazier.¡Así es el CASP! ¡Un modelo de vida! Sevillano solitario, pregonero íntimo, conocedor de liturgias insólitas, amante de placeres solitarios y de conversaciones priostiles. Su ultima ereccción la tuvo al escuchar el "Tantum Ergo" y la última falda que levantó fue la saya de la Virgen de una pro-hermandad bien situada en las próximas quinielas. ¡El CASP!... una especie cuyos mandamientos se resumen en dos. Primero, amar la Semana Santa sobre todas las cosas y, segundo, esperar lo que dijo un gran amigo "que nuestra vida sea un Domingo de Ramos continuo, lleno de paz, amor, gracia y esperanza; despojado de toda amargura y que, guiados por una buena estrella, nos permita mantener, aunque con humildad y paciencia, la cabeza enhiesta. Que así sea”
Definitivo: ya era primavera en el Corte Inglés...


1.2.09

1 DE FEBRERO. INSERCIÓN OBLIGATORIA

Dos días antes dimitía el dictador. Año 1930. Adiós a Primo de Rivera. Se acababa la censura. Adiós a los textos de alabanza a don Miguel y a su hombría, al señor Cruz Conde y su energía y, probablemente, hasta los referentes al mismo Rey. Malos tiempos para el Borbón. Hubo quien suspiró aliviado. Era conocido por Galerín. Su Sevilla en broma era quizás la obra más seria que se publicó por entonces. Su autor respiraba así de tranquilo tras la marcha de Primo de Rivera:
“Empezamos a escribir este libro el mismo día en que cesan en sus cargos los que han mangoneado en Sevilla 6 años, 6 meses y 13 días. ¡Ese tiempo madurado nuestra condena! ¡Seis años escribiendo al dictado! ¡ya se fueron!. Con la dictadura nos ha pasado lo que aquel esposo a quien se le murió la mujer, que era un güeso, y le escribió a un amigo diciéndole:
Mi pobre mujer murió. / Dicen que en la gloria está./ Yo no sé dónde estará / ¡pero en la gloria estoy yo!
¡Respira, corazón, respira! Ya podemos escribir sin falsilla y sin entregar nuestro pobre trabajo a un señor muy simpático pero que de las cosas de Sevilla no sabía una palabra. ¡Ya se puede escribir la verdad! ¡Ya son hombre de corazón los que leen! ¡Ya!
¡Ya se marchó Primo! / Se ha ido Cruz Conde / ¡Se marchó Vicente! / ¡Corazón, respira! / ¡Señores, qué gente...!
¡Cuánto melón sin calar ha pasado por las esferas oficiales sevillanas! ¡Qué cosas se han hecho y cómo recibían a los periodistas estas curcubitáceas con fajín. Cuando nos resistíamos a publicar una cosa o no asistíamos a una reunión nos tiznaban la cara con una nota oficiosa... de inserción obligatoria.
- ¡Lo voy a usted a mandar a Burgos!
- ¡Lo voy a usted a mandar a Cuenca!
¡Dílo ahora, valiente, que tienes menos fuerza que una gaseosa! Qué diítas, lector querido... Cada vez que me vestía de limpio era en mi casa una llantera...
- ¿Te vas esta noche? ¿Dónde? Que escribas... Llévate abrigo...”.
No tardaría un mes en morir en París el viejo dictador. Mucho se especuló con aquella muerte tan cercana al día de su dimisión. Se habló incluso de un envenenamiento. Cuando Galerín se refirió al tema lo hizo con sinceridad: “¡De veras que nos ha dado pena la muerte de don Miguel! Lo tratamos de cerca varias veces y no nos pareció mala persona. Hizo mucho por Sevilla Seamos sinceros. Vació las arcas del Tesoro en Sevilla. De ahí los celitos de Valencia y otras capitales...”
Se abría una nueva etapa. O no. Llegaba el “error Berenguer”. Un nuevo dictador...o menos. Según Galerín, o Agustín López Macías, los que habían medrado se apuntarían a nuevos partidos. De camisa vieja a chaqueta nueva. Surgía un nuevo partido, el D.S.D. ( Deseo ser diputado) ¿Dónde hay que afiliarse?