28.5.08

27 DE MAYO. EL ESPARTERO


Dicen que en el Café París existía un retrato suyo. Tanto respeto transmitía que los caballeros se descubrían la cabeza ante él cuando pasaban. Signo de respeto. Explícale eso a tus alumnos de la ESO cuando entran con la gorrita en clase. Le puedes hablar del recinto cubierto, de la costumbre, de los modales...algo tan inexistente como el Café París. Aunque hubiera valido la pena conservarlo.
Sí se conserva en el cementerio la más ruinosa de las tumbas. Desde su origen. Una vez pasado el mausoleo a Joselito el Gallo hay una tumba que suele llamar la atención del visitante. Sobre la lápida una columna rota. Su fuste aparece seccionado por la mitad y el capitel aparece fragmentado a los pies de la columna. ¿Es rotura de una tumba abandonada, gamberrada o es obra de significado simbólico? Puedes llevar a tus alumnos de la ESO al lugar, no sabemos si se quitarán la gorra pero puedes probar a contarle la historia del difunto.
Díles que allí están los restos de Manuel García Cuesta, el torero que nació en 1865 en la plaza de la Alfalfa de Sevilla, en una espartería que acabaría dándole nombre artístico. Debutó en Sevilla el 12 de Julio de 1885 y tomó la alternativa el 13 de septiembre a manos de Antonio Carmona “el Gordito”. A lo mejor eso no es políticamente correcto, así que puedes decir aquello de “El obesito”. Cuéntales que desde su alternativa en 1885 el “Espartero” se destacó por su valor en la plaza y por una vida apasionada que lo llevó a tener un hijo ilegítimo con una dama de la alta sociedad sevillana, hijo al que la copla popular mencionaba: “Al hijo del Espartero, lo quieren meter a fraile, pero la cuadrilla dice, torero como su padre…”. Seguro que ya vas captando el interés de tus sujetos de aprendizaje. Aprender a aprender. Recuérdales que esta vida tan apasionante se truncó de pronto: un día como hoy de 1894 el toro “Perdigón” acababa con la vida del torero sevillano en Madrid. Un miura con pintas de asesino. Así captarás más atención todavía... Demasiado joven para morir…demasiado arte por apuntar…Su tumba tenía que ser un símbolo de aquello. Con la muerte de Espartero se truncó su vida, se truncó su arte. Desde entonces, una columna rota en el cementerio de Sevilla nos recuerda el fin del arte del Espartero. Para acabarle puedes recordar a tus pupilos que Martín Pareja Obregón es bisnieto del Espartero. Seguro que alguno se sentirá motivado en su aprendizaje y te narrará algún cotilleo de actualidad...Pero no te pases en tu explicación. Que algún alumno te recordará que es tarde y que quieren desayunar. Remata tu faena, ya que otro remate no puedes...Recuerda al muchachito la frase de Don Baldomero. Pura filosofía. “Más cornás da el hambre...”

26.5.08

26 DE MAYO. SIESTA MORTAL


Todavía no había llegado la Feria ni la calle del Infierno. Pero la ciudad ya tenía su propia “casa del Crimen”. Ni los Galindos ni Puerto Hurraco. Uno de los crímenes más famosos se cometió en 1552 en el número 6 de la calle Candilejo. Allí vivía el famoso mercader donde Cosme de Molina que apareció muerto un día de mayo junto a sus criados y a su esclava. Un festín de sangre. Un misterio por resolver.
Hubo detenidos, interrogatorios, pesquisas y declaraciones enfrentadas. Todo a puntaba a un clérigo amigo del fallecido. Pero Vallecillo el cura no confesaba. A la primera. Ni a la segunda. Pero sí a la tercera...
“Confesó que él tenía ciertas dudas en cantidad de quince o veinte mil reales y, viéndose fatigado por los acreedores, el demonio y su propia malicia le engañó a que matase a dicho Cosme, que este pensamiento trajo por espacio de quince días y el jueves de la Ascensión del Señor que contaron 26 de mayo de 1552 fue a Casa de dicho Cosme a la siesta y después de mediodía, dentro d su casa se acostó a dormir la siesta ambos vestidos y cuando le sintió dormido se levantó de la cama y vino al patio, tomo un palo con el que atrancaban la puerta de noche y le dio con él en la cabeza al dicho Cosme, del cual golpe le aturdió y luego sacó una daga y le dio cuatro puñaladas dejándolo muerto y que después se estuvo un rato con él.
Y entonces llamó a otro mozo llamado Martin que estaba arriba, el cual vino y el dicho Pedro le dijo: sentaos aquí, hablaremos un poquito. Sentáronse en sus sillas, y a poco el Martín se comenzó a dormir y así como los sitió dormido, tomó el dicho palo y le dio otro, del cual cayó muerto. Lo tomó y llevó arrastrando a la dicha sala, y después estuvo casi dos horas paseándose.
Al cabo de éste llamó a la negra, la cual bajó y le dijo que le encendiera un candil, al efecto de que estándolo encendido la mataría y así que la dicha negra volvió las espaldas para entrar en la cocina, le dio con el palo en la cabeza y la mató.
Y luego abrió un arca donde el dicho Cosme tenía las escrituras y sacó los reales que se han dicho y una especie de taza y jarro de plata, luego abrió las oras arcas y sacó lo que llevaba dicho y tomó asimismo una taza, un salero y dos cucharas de plata que estaban sobre la mesa y de todo hizo un lío, lo cual envolvió en una sábana....”
ADVERTENCIA:
1.- Las autoridades sanitarias recomiendan encarecidamente no dormir la siesta con desconocidos pues puede ser muy peligroso para la salud.
2.- Las autoridades económicas recomiendan al Banco Central europeo que baje los tipos de interés de las deudas hipotecarias no vaya a ser que alguien tome determinadas medidas al no poder pagar su deuda...

23.5.08

CORPUS DE DOMINGO: AGENDA OCULTA.




Uno. “A quien madruga Dios le ayuda”. No estás muy seguro de la afirmación pero el domingo del Corpus lo sueles hacer. Domingo de Corpus litúrgico, que ya se sabe que el día que reluce más que el sol sigue siendo el jueves. 8:00 horas. Monasterio de Santa Paula. La soledad te ha acompañado en tu búsqueda de Dios camino del monasterio de jerónimas. Una espadaña de azulejos te ha saludado junto a la brisa de la mañana. Si Cernuda decía que la felicidad está detrás de un portón, el tuyo es de ladrillos mudéjares y se recorta en un paisaje limpio de blancos y azules. Entras. Un compás que huele a eternidad de cipreses y romeros. Nueva portada. La de un templo del siglo XV donde el gótico se despidió de Sevilla para dar la bienvenida al Renacimiento. Allí estarán, siglos más tarde, los tondos de Niculoso Pisano trasladando Florencia a Sevilla. Junto a ellos los ángeles de Pedro Millán en cerámica blanca. Flameros y pináculos te coronarán de ilusiones. Tránsito hacia el interior. Probablemente poco público, escogido, disperso entre azulejos y dorados. Una iglesia gótica con artesonado mudéjar, portadas manieristas y retablos barrocos. Te colocarás a los pies del Cristo del Coral, el crucificado medieval que regaló Montesión. Mientras sigues la liturgia te sentirás una ofrenda más al legendario y milagroso Cristo. Encerrado en una urna de cristal. Como las monjas jerónimas. Enrejadas al otro lado de la iglesia. Cautiverio de inocentes. Clausura que hoy se abre mientras te envuelven los cánticos de las hijas de San jerónimo. El Padre de la iglesia y el penitente del desierto. Lujo y pobreza, Biblia Vulgata y tentaciones en el desierto. Simbología de la vida misma. Lo interior y lo exterior. Cuando se organice la procesión, se formarán las filas de emociones en tu interior. Poco a poco, sostenido por voces celestes y bajo palio Dios se introducirá en el claustro principal. Ya lo estaba pero ahora se hace presencia física. Lo acompañarás bajo los arcos del claustro manierista. Dios escoltado por monjas jerónimas. El tiempo se habrá parado a contemplar la escena de hábitos, custodias y sonrisas bajo palio. En las paredes, unos azulejos burlescos parecen contener su mueca al paso de Jesús Sacramentado. Así es el barroco. Lugar de contrastes. Cuando termine la procesión, después de la bendición, notarás la ausencia de una Esperanza que un día fue monja. Quizás tus pies se habrán posado sobre su tumba en el claustro. Notarás su eterna sonrisa en el cielo, la de una Madre que tantas veces te acompañó en tu visita el convento. Sonrisa en los cielos. Dios debe estar contento. La sonrisa eterna subió al cielo. Volverás al mundo de los vivos entre las blancas paredes de San Marcos. ¿Por qué buscar entre las muertas al que está vivo?.
Dos. Has pasado al mundo de los vivos. Pero sin estridencias. Quizás al de unos vivos de hace muchos años. Porque la Plaza del Museo y la Magdalena se han quedado anclado en siglos pasado. Unos servidores de librea así te lo anuncian, también los chaqués, los niños carráncanos y los lazos de las niñas vestidas de domingo. Otro tiempo. Arte en la calle y al otro lado del muro. Entre columnas salomónicas se enmarcará el Niño Jesús de Jerónimo Hernández. Orígenes de la Quinta Angustia: propagar a los cuatro vientos que el Dulce Nombre de Jesús está por encima de todo. Después vendrá la Inmaculada de Hita del Castillo que recoge todos esos vientos. El movimiento de las manos de un caballerito de San Juan de la Palma se traslada a una Virgen de la Magdalena. Hermandad Pura. Y no estamos en Triana. Entre aromas de romero y conducida por un capataz de tus viejas estampas del siglo XIX llegará la custodia. Plata del siglo XVII y del XVIII. Manos de orfebre para cobijar a Dios sobre la Inmaculada y bajo el libro de los Siete Sellos. Con siete secretos. Siete misterios. El de Dios hecho presente ha pasado por delante tuya de la forma más elegante...
Tres. Quizás sea la segunda opción. Quizás la tercera. Cuestión de tiempo. Una vez más llegarás al final de la calle Santa Clara. Un año más te conviertes en un hombre perdido hacia un afán inconcreto. Recuerdos de poeta olvidado. La paz de Santa Clara y el monasterio de San Clemente. La orden del Císter en Sevilla. Por el antiguo compás entrarás a otro mundo. Un mundo de silencio, de ausencias, de presencias...Misa de Corpus en San Clemente. Atraviesas bajo el azulejo del titular, y ves el ancla de su martirio transformada por la luz de la mañana.
Entrada a la iglesia y entrada a otro mundo. El mundo de un rey bajo cuyos dominios no se ponía el sol, el mundo de una orden centenaria de silencios y austero blanco y negro. Bajo una impresionante armadura mudéjar ocupas tu lugar. No habrá mucho público. El justo. Porque te acompañan también las santas de los muros, la sonrisa cómplice del Niño de la Virgen de los Reyes, la mirada interrogante del Bautista, la fortaleza del San Clemente del altar mayor... Y una comunidad de monjas que hacen presente el espíritu medieval de San Bernardo en pleno siglo XXI. En la uniformidad del blanco y el negro verás la dulzura de madre Macarena, notarás la sencillez de madre Soledad, oirás a los ángeles en la voz de sor Esperanza, te contagiará la compostura de sor Purificación. Monasterio de abadesa con báculo y mitra. Día de emociones y de contrastes, los años de las mayores y la juventud de las nuevas novicias venidas del nuevo Mundo.
En la consagración recuerdas lo que alguien te contó una vez: Dios es un misterio. Misterio que empiezas a comprender en una antigua pintura de la Fuente de Vida sobre el Sagrario.
Termina la misa y llega el momento. Rápidamente se forma la procesión. Un momento único. La posibilidad de entrar en otra Sevilla Oculta acompañando al mismo Dios. Atraviesas el claustro. Escuchas los cánticos. Te detienes en cada ángulo del patio, en cada una de las capillas. Un sacerdote, con capa pluvial antigua canta al Amor de los amores. Y una procesión medieval, sacada de otro mundo pisa romero esparcido por el suelo. Entre un bosque de columnas pareadas, la sombra de una espadaña, el aroma del incienso y el color de unos geranios recién regados completarán tu recorrido por el claustro de San Clemente.
El tiempo no habrá pasado. Caminas de regreso buscando a Dios por otro rincón y, en la blancura de Santa Clara, recuerdas una lápida del claustro que pisaste: Sepultado /el cuerpo venerable aquí reposa/esperando resurrección gloriosa/ para ser en el cielo colocado...Mañara femenino junto a la Barqueta. No recuerdas cómo terminan los torpes versos pero piensas que ya viviste algo de ese cielo en un rincón del mundo.
Cuatro. El Robocop. No puedes evitar caer en un sentimiento popular. Popular o populachero, sabe Dios. Porque Dios está en todas partes. Al menos eso te contaron. También al otro lado del río. Allí se funde con el pueblo. No hay un Dios más humano que el que recorre Triana. Las fuerzas te llevan allí después de los silencios conventuales. Y te encuentras con el pueblo. Pisas, hueles y sientes el romero. Otros años fue un Evangelista con calle pero este año verás a las dos patronas de Sevilla...que eran de Triana. Misterios de la ciudad. Como el gran misterio de Dios. Justa y Rufina vuelven a salir a la calle, aunque ya lo hicieron el jueves. No hay un corpus más sevillano. Porque así es el Niño Jesús montañesino del primer paso, y así es la Inmaculada barroca del segundo. Estandartes y representaciones del arrabal. En un escenario real, popular y auténtico. Quizás de los pocos que quedan. Mantones de Manila en los balcones y altares en la calle. Dios bajo una custodia de plata de la Parroquia de Santa Ana, la otra Catedral de Sevilla. Cordero Místico sobre el grupo de Santa Ana bendita, que de las tres limosnas que das al día, una sea la mía, la Abuela del mismo Dios que habita en el piso superior. Una custodia de 1729, de Andrés de Osorio. Techo de plata para un Dios que trianea. Una procesión que despierta tus sentidos. En día de Corpus. Con el cuerpo cansado. Con el corazón reconfortado. Casi has sido ubicuo. Estuviste casi en todas partes. Sol del Aljarafe. Dios de Dios. Luz de Luz. Dios está en todos los rincones...

19.5.08

20 DE MAYO. ESTRELLAS DE CINE


Él ya había sido casi de todo: un aventurero que firmaba como el Zorro, el capitán de los tres mosqueteros, nada menos que Robin Hood e incluso un ladrón en Bagdad. Además, en aquellos días se preparaba para ser un pirata negro. No se podía negar que era un hombre de acción...
Ella era realmente elegante. La habían llamado la “novia de América” pero le gustaba más cuando le decían aquello de “la chica del cabello dorado”. Cosas del destino. Acababa de ser doña Rosita, una cantante callejera y pocas veces se había sentido tan metida en su papel como aquellos días.
No sabían porqué pero habían venido a Sevilla. Les habían hablado de lo pintoresco del lugar, de la vida en la calle, de las fiestas, de sus monumentos...pero aquello había que verlo. Aquel día lo vieron con sus propios ojos.
Sevilla deslumbró a la pareja. Era diferente. No sabían si más bella, o más grande o más histórica que otras ciudades. La diferencia estaba en otro aspecto: era más auténtica. Cuando llegaron a aquella provinciana ciudad un caluroso día de mayo de 1924 se olvidaron de la ciudades de cartón piedra y de los decorados de su trabajo. Porque la vida real estaba aquí. En Sevilla. A pesar del pantalón claro, el calor hizo que la chaqueta de hilo y la corbata le sobrara a él. Ella en cambio agradeció el recogido de su pelo y el sombrero a la moda de París. Como agradeció haber entrado en aquel enorme corralón. Con cientos de habitaciones. Le dijeron que se llamaba corral del Conde e imaginaron a un antiguo señor feudal. Ahora era otra cosa. Auténtica. Con gitanillos descalzos, viejas con el pelo recogido, mantoncillos y peinas de verdad. Lavaban en un pilón enorme, en medio del patio. Cantaban. Brillaban su oros bajo el sol de aquel auténtico escenario. Refregaban la ropa mientras el blanco de la cal combatía con la luz de la tarde. Pura hermosura en la más absoluta y auténtica miseria. Como la vieja desdentada con la bata de rayas. Miró fijamente a la pareja y les lanzó algo así:
- “Olé las muchachas y los caballeros guapos y elegantes. Paresen ustés unas estrellas der sine. Son igualitos al Duglas y a la Mari Piford de Jolibú”.
No se sabe si era adivina del porvenir, pero aquella gitana acertó por el presente. Allí estaba la pareja más famosa del cine de los años 20: Douglas Fairbanks y Mary Pickford. Allí, en un corralón de la calle Santiago. Allí rieron, allí se emocionaron y allí disfrutaron una tarde inolvidable. Tanto, que al salir del corralón, el elegante caballero sacó una billetera y repartió nada menos que doscientas pesetas.
“Vayan condió, buenos mozos".
Alguien les dijo que el dinero era para vino y juguetes y que, realmente eran estrellas de cine. Tarde de mayo en un corral. Alguien creyó ver dos estrellas del cielo...

16.5.08

PREGONERO DE GLORIAS. (RANCIAS)


Despertó con la primavera en el rostro y el verano en la entrepierna. Mayo en el almanaque. Noche de sueños y de espera. El que espera desespera. Se encaminó hacia el cuarto de baño con la solemnidad que exigía el momento. Serían palabras sentidas. Exaltación más que pregón. La espuma de afeitar y el espejo aguardaban las sentidas palabras matinales. Se apoyó en la placa de mármol con la elegancia discreta de sus calzoncillos abanderado y abanderó un canto lleno de emoción:
“Sevillanos y sevillanas:
Primavera sevillana. Gloria en los sentidos. NI triduos, ni quinarios, ni septenarios, ni novenas, ni sabatinas (el sábado toca...), ni exposiciones, ni procesiones, ni documentales de la 2, ni "La Aventura del Saber", ni "Redes, ni "Club de las ideas"...
¡A la gloria sevillanos! (alguno diría al Glory, lugar rancio donde los haya cuya desaparición lloramos como pérdida irreparable). Años irreparablemente perdidos que diría el poeta... Triunfo del canal del 4 y del 7. Mayo caliente en la mente sevillana... ¿Ubi sunt? . Mujeres rancias de siempre...Las de tonos honorables, las de lencería añeja de la Corsetería Modelo o de Velasco, las que huelen a ¿perfume? Joya de Mirurgia, las que piensa, que una tanga es la versión femenina del tango y los únicos polvos que anhelan son los del Nilo...(rancio maquillaje pensó para sus adentros). Vengo a cantar tu tintazo rubio platino, vengo a soñar con el rubio siliconado que anhelan nuestras noches de vídeo comunitario, vengo a pregonar vuestra presencia inconmensurable y sevillanísima en rastrillos, almonedas, beneficencias y fiestas de la banderita. Vengo a cantar tu esencia y la de tu diminutivo: Keki, Mali, Neni, Cuqui, Coqui, Mendi, Nandi, Chuqui, Chochi... ¡Qué grandeza se esconde entre las menudencias cotidianas de las vivencias diarias....! Viene a mi mente vuestra imagen y pienso en vuestro interior. ¡Ay el interior!... Dice el refrán que ni tanto ni tan calvo. Nunca mejor dicho... Ni el bosque de la Cantudo ( que se quedó en La Trastienda), ni el mollete de la Berrocal, que también se depiló el cerebro. Ni mujeres internet (de banda ancha) ni depilación brasileña. Sevillanas: ¡Viva el término medio! ( Y lo de en medio...) La vivencia de una amiga así me lo contó: al ver a su pareja haciéndole cunnilingus, rancia comidita para nuestros oídos, empezaba a reír al ver a aquella persona con postizo bigotillo recién puesto. El hombre buscando coquina y ella recordando a Azkalgorta... Por eso os canto hoy: ¡Mesura, sevillanas!. Ni siliconas, ni rellenos, ni apreturas, pero tampoco el Matto Grosso en vuestra entrepernura¡ A la gloria, sevillanas! A la gloria
He dicho.”
Aquella mañana se sintió pregonero. Ahora lo llaman pregón íntimo...

13.5.08

13 DE MAYO. CELESTE Y ROSA


¿Celeste o rosa?. ¿Niño o niña?.¿Se le da al recién nacido el color tradicional o eso es cosas de carcas? ¿Se elige otro color para romper la costumbre?. Discusión tonta. Propia de desocupados, de revistas de moda o de tertulias televisivas de aburridos en su engreimiento. Porque es un dilema que solucionaste hace ya muchos años. Te pareció fácil. Mira que eras pequeño...
13 de mayo de 1954. Vestido de domingo. Así amaneciste para asistir a lo que te anunciaron como un día histórico: coronaban a María Auxiliadora. Aquello te pareció al principio algo sin importancia. Una corona ¿para qué? Si la Virgen ya tenía una. Tu la conocías de sobre. Tus padres te acercaban tanto a la imagen que te sabías su cara de memoria...
A primera hora de la tarde ya estabas en camino hacia la Puerta de Jerez. No lo recordabas pero entonces se llamaba algo así como plaza de Calvo Sotelo. Realmente no sabías quién era ese señor, porque lo que te importaba realmente era la gente. Nunca antes habías visto tanta junta. Una masa inmensa por la Avenida, por los jardines, por la calle San Fernando...Tu padre te hizo correr para coger un buen sitio. Allí lo viste todo. Un altar espectacular con macetas, flores, velas y banderas. Con los colores salesianos. Miles de personas. Cuando llegó el paso con la Virgen de tu colegio parecía que el mundo se acababa. Millones de palmas sonando. No se te olvidará. Tampoco la figura de aquel cardenal, el que prohibía los bailes de tus padres. Con aire ceremonioso leyó el edicto de la coronación. Te sentiste alguien importante. Sobre todo cuando se entonó aquello del “Rendidos a tus plantas....”. Para ti no había otro himno, ni otra música que te emocionara más. Miles de gargantas con el himno salesiano. En Sevilla. Tu centro del mundo. En medio del cántico, el cardenal bendijo las coronas y el cetro de oro y piedras preciosas. Recuerdas el momento casi de memoria. Como el recorte de periódico que guardaste para el día que supieras leer en condiciones. Decía así:
“Un clamor inenarrable ascendió de la multitud al ser coronada la Virgen. Poseídos de la mayor emoción, los asistentes prorrumpieron en vítores enardecidos, al par que millares de pañuelos eran delirantemente agitados sobre aquel mar de cabezas y los abanderados hacían ondear sus enseñas. Muchos niños eran ofrecidos a la Virgen, alzados en brazos de sus padres. Había lágrimas en todos los ojos...”
Todavía hubo una emoción más. Después de ver a tu Virgen coronada un avión tiró pétalos de rosa y octavillas de alabanza. Tu padre te cogió una y tú la guardaste como un tesoro. El de un día que no olvidarás. Una corona y muchas emociones. El día que tuviste clara tu elección. Celeste y rosa...

11.5.08

12 DE MAYO. PANCRACIO


Hay una moneda que conservas como oro en paño. Con su agujero al centro es muy difícil de encontrar. No tiene valor pero sí mucha utilidad. Tanto, que el próximo jueves te recordará tiempos ya pasados. La moneda para la cuerda del trompo y para ponérsela al santo.
Hoy te volverás a sentir en esa Roma que luchaba contra el cristianismo. 12 de mayo. San Pancracio. Salud y Trabajo. Está en el bar, en la tienda, en el taxi, en la cartera...pero tú irás a un convento del que no sabes el nombre. Te contaron que es de monjas franciscanas, que tiene retablos barrocos, que su portada es de Juan de Oviedo, que su interior es un remanso de paz en plena calle Águilas. Pero eso te importará poco. Al coger el taxi tu indicación será breve: “Lléveme a San Pancracio”. Y no se dirá más.
De San Pancracio son los lunes. Pero hoy será especial. En la puerta, vendedores que te recordarán a aquella gitana que hace años vendía perejil. Dicen que fue ella la que puso de moda colocarle el perejil al santo. Perejil y una moneda. Aunque la costumbre de la moneda no sabes de dónde viene. Da igual. Tú guardas una como un tesoro.
El interior del templo te parecerá otro mundo. Luces doradas, mártires crucificados, un Nazareno con la cruz al revés, una reja para separar la clausura... Todo de gran valor. Pero a ti te interesa una imagen de serie, como tantas miles repartidas por el mundo. Estará entre velas, flores y perejiles. Alguien te dará un folleto que, un año más volverá a leer: San Pancracio. Nacido en Frigia, en Asia Menor. Hijo de Cleonio. Se hizo cristiano con su tío Dionisio en Roma. Allí fue perseguido por su fe cristiana en tiempos del Emperador Diocleciano, Fue martirizado cerca de la vía Aurelia, en el año 275, por no a adorar a los dioses. Allí se le construyó una iglesia. Su nombre se mantiene en lugares como un templo de Londres o incluso en una estación de metro.
Son datos que se te olvidarán un año más. Tú simplemente pedirás salud y trabajo. Hecha tu petición saludarás a algunos conocidos. Alguno te contará que un cardenal hizo una novela donde aparecía este santo. Te sonará extraño. Y saldrás de la iglesia con una estampa en el bolsillo. De un joven mártir. protector contra la mentira. Del patrono de caballeros y niños. De un santito vestido siempre de rojo y verde como si fuera un San Juan. Con un libro y una inscripción latina que tú no entiendes. El santo de los perejiles y el dedo al cielo, que parece pedir un donut...Con su moneda en el dedo. Como la que tu guardas, tu pequeño tesoro.
Y, una vez más, pensarás que los inventores del euro no se acordaron de hacer una moneda con agujero para tu santo de la Calle Águilas...

8.5.08

9 DE MAYO. LA EXPOSICIÓN


Eras un niño de pantalón corto pero aquel día 9 de mayo de 1929 es una fecha que no se te olvidará nunca. En tu casa habías escuchado algo de unas obras que no se acababan, algo sobre un tal Primo de Rivera e incluso algo sobre el mismo rey. Todo te sonaba extraño. Pero tu padre, casi en brazos, te había llevado a conocer los cambios de tu ciudad: nuevas plazas, nuevos edificios, nuevos pabellones, nuevos parques...
Aquel día te levantaron temprano y te pusieron el traje de los domingos. Tu madre se empeñó en marcarte la raya del pelo y entonces te diste cuenta de que había algo importante.
- “Hoy se inaugura la Exposición Iberoamericana”, te dijo de tu padre.
Y a ti te pareció que ibas a estar en el centro el mundo.
Tu vecina te dijo que era también el día de la Ascensión del Señor pero tú ya no estabas para más datos. Endomingado saliste a la calle. Todavía recuerdas el ambiente: soldados desfilando, autoridades, militares con galones e incluso mujeres con mantilla. Cuando llegaste a aquella enorme plaza de cerámicas y ladrillos te pareció que estabas en otro mundo. Preguntaste a tu padre de dónde venían tantas banderas y el no supo qué contestar...
-“Son banderas de América y de otros países”, te comentó.
Parece que fue ayer. De pronto comenzaron a sonar cañonazos en honor del rey y tu padre te tuvo que coger en brazos. En medio de una larga comitiva llena de personas engalanadas lo viste llegar. Nunca pensaste que pudieras verlo tan cerca. Con su bigotillo a la moda y muy delgado, Alfonso XIII te pareció un personaje simpático. Cuando moviste tu banderita de España te pareció que te miraba y te sonreía a ti. Eso le dijiste a tu padre. Poco antes habías visto a un cura con una capa muy grande, como la que se ponía el cura de tu barrio en la procesión del Corpus. Tu madre te dio que era el Cardenal y que estaba bendiciendo la Exposición. Tú no entendiste aquello: parecía la procesión del Domingo de Ramos, aunque los curas estaban mejor vestidos. Recuerdas que entre tanto desfile y ceremonia hubo un rato que te aburriste. Fueron dos discursos que hablaban de las razas y de América, y de la Exposición y de los pabellones y de cosas que no entendiste. Pero recuerdas las palabras del rey “Queda inaugurada la Exposición Iberoamericana de Sevilla”. Y entre miles de personas volviste a tu casa sintiéndote alguien importante...
Muchos años después, cuando ves un cuadro de Gonzalo de Bilbao en el Alcázar te vuelves a sentir un niño. Un niño que el 9 de mayo 1929 sintió que estaba en el centro del mundo.

5.5.08

6 DE MAYO. PÓPULO



Lo puedes llamar mercado del Pópulo, de entradores o mercado del Arenal. Un mercado de los de siempre: con puestos, con calidad y con historia. Mucha historia...
Año 1626. El abad Alonso Sánchez Gordillo nos cuenta lo siguiente: “En la calle Harinas vivía Antonio Pérez, natural de Barcelona y doña Antonia de Villafañe, su mujer, en honrada aunque corta fortuna, tenían en el portal de su casa, como en muchas se suele , un lienzo con la imagen de nuestra Señora del Pópulo a que cada noche encendían una lamparilla. Y en enero de 1626 ensoberbecido el río Guadalquivir con las muchas lluvias, hizo tan gran avenida que se vio casi toda Sevilla poseída de sus aguasen que se vieron mil géneros de estragos y ruinas. Y entre los sucesos memorables de esta ocasión, sucedió que una de las noches de mayor avenida anego el agua la casa de este devoto de María Santísima, y subiendo sus olas hasta el cuadro, lo arrancaron de la pared, pero con notable maravilla fue visto por muchos a los tres días andar sobre las aguas derecho, como si tuviera fijo arrimo, y delante de él un corchillo en que estaba la luz, que sin alimento de aceite y combatida del furiosos viento que corría alumbraba a la soberna Reina de los Ángeles. Por tanto, movidos los dos piadoso casados prometieron para que quedase en digna veneración, darle un convento. Es tradición que con perplejidad echaron en un vaso varias cédulas y por dos veces sacó un niño la suerte para que fuera el recién fundado convento de los Agustinos Descalzos. Teniéndolo por determinación divina lo llevaron a él y fue recibida por los religiosos con increíble alegría y gozo espiritual. Pusiéronla en su altar mayor y comenzó a ser venerada y a resplandecer muchos milagros, por lo que el convento fue desde entonces conocido como Nuestra Señora del Pópulo, aumentándose el deseo de tener sitio para fabricar un templo decente...”.
Al milagro siguió la historia. El convento se pudo terminar años más tarde, un día como hoy de 1666. Debió ser espectacular. Con una larga historia. Con azulejos en su fachada según nos cuentan antiguos grabados. Y fue más cosas. Allí estuvieron los castellanos nuevos, o sea los gitanos, con su hermandad. Los monjes se fueron en 1835 después de la desamortización. En pocos años se convirtió en Cárcel Provincial. Allí rezaron cantando los presos a la Esperanza de Triana. De allí nació la marcha “Soleá dame la mano” y de allí se liberaron a los presos en la República. Fue un alcalde republicano el que empezó a derribarlo con sus propias manos y pasó a ser mercado donde un día dejó huella el rostro de la Esperanza del otro lado del río.
Cuando compres los garbanzos, el pan ó la carne ya sabes una cosa: tienen valor añadido. Están cargados de historia....

2.5.08

2 DE MAYO. DAOIZ


Cuando yo era muy pequeño, solía escuchar a mi madre una frase enigmática que lanzaba a mi hermano mayor: “anda hijo, que tienes más pies que Daoiz...”. Como la imaginación infantil no tiene límites uno imaginaba un personaje tipo Mazinger Z, el cómic de mi infancia, un ser fantástico con un pie descomunal. A los pocos años supe que no. Me enseñaron que Daoiz era un héroe. Luis Daoiz. Junto al capitán Velarde y al teniente Ruiz aparecían en mi libro de 5º de EGB: con un cañón, vestidos de militares y luchando contra los franceses. Entraban en un capítulo dedicado a los considerados valientes españoles, y se mezclaban con Guzmán el Bueno, el Cid Campeador y la mismísima Agustina de Aragón. Curiosamente todos tenían espadas o cañones.
Ya en el instituto aprendí algo más sobre el personaje histórico. Luis Daoiz. Nacido en Sevilla en 1767. Realizó la carrera militar, llegando al grado de segundo teniente con sólo veinte años de edad. En 1794 participó en la guerra del Rosellón contra los franceses, guerra en la que fue hecho prisionero. Tras ser liberado participó en la defensa de Cádiz contra los ingleses. Después de participar en dos viajes por América fue destinado a Madrid, pasando con el grado de capitán a la guarnición de la capital. En Madrid vivió la invasión francesa, poniéndose al frente de la resistencia y repartiendo armas para combatir a los invasores. En la lucha fue herido por la metralla y por una bayoneta, muriendo poco después como uno de nuestros héroes del 2 de mayo.
Cuando fui descubriendo los monumentos de la ciudad conocí la larga historia de la escultura que le dedicaron en la plaza de la Gavidia. El conocido escultor Antonio Susillo, siguiendo retratos del personaje, lo representó de un modo heroico, teatral, vestido con el uniforme de Artillería, con sable y una carta arrugada en la mano. Puro teatro. Representa el momento en que arrugó la orden de los franceses diciendo algo así como “he aquí el destino de una orden injusta”. La escultura fue fundida en bronce en la Fábrica de Artillería de Sevilla y se colocó sobre un pedestal de mármol. Todo el conjunto se rodeó de cañones en bronce a modo de verja donde van escritos los nombres de las personas que colaboraron en la gestión del monumento. Tres metros y medio de bronce que fueron inaugurados en 1889 y que costaron casi sesenta mil pesetas de las de entonces.
Cuando paso por la plaza de la Gavidia veo historia, heroísmo, arte. Miro a Daoiz y recuerdo que señala la casa donde nació. Pero la historia y los recuerdos son así. Miro sus enormes botas sobresaliendo del pedestal de mármol y no puedo evitar acordarme de la talla del pie de mi hermano.

NOTICIA, PROPUESTA, ELECCIÓN Y DEDICATORIA


Ya que el amigo Lorenzo Blanco nos pone a prueba, les voy a regalar algo. Lo primero el avance de una noticia: en unos meses "El almanaque de Sevilla" se convertirá, d.m., en un libro. 365 historias de Sevilla. Ya que este rincón tiene tanto amable visitante les voy a regalar a cada uno una historia, si es posible. Por ello les pido una cosa: ojeen en el archivo y recuerden viejas historias del almanaque. Elijan una. Esa será la que les dedique (si la editorial y los maquetadores nos lo permiten). Y si no, las dedicaré a mano. Reservada para ustedes. Hay donde elegir y habrá más. También pueden opinar sobre la historia que más les gustó o las que incluirían en el libro... En fin, una dedicatoria que les da trabajillo. Están invitados...

1.5.08

UNOS MINUTOS PARA LA PUBLICICIDAD...


FIRMAS EN LA FERIA DEL LIBRO (PLAZA NUEVA):

Domingo 4 mayo. Librería Beta. 19,30 - 21,00 h.

Martes 6 mayo. Librería de El Corte Inglés. 19,00 - 20,30 h.