23.2.08

ORIGINAL Y COPIA


“Ha sido muy grande la devoción que el pueblo ha tenido a Cristo Nuestro Señor en su santa imagen, e manera que en tribulaciones acude a su Señor y especialmente en las esterilidades y altas de agua; de lo que se han visto milagros notables, como sacarle con tiempo sereno de su capilla y no poderlo restituir a ella por la abundancia de lluvia, que Dios ha enviado, especialmente guiando la procesión al humilladero o Cruz del Campo, que parece que va de buena o mejor voluntad allí, como lugar que recuerda la memoria de su triunfo, donde lució su misericordia con la copiosa redención que allí obró. Y allí se refiere que en el año 1525 habiendo habido en Sevilla una gran sequía y falta de agua, sacando con tiempo claro la imagen del Cristo en procesión, y llevándolo al humilladero de la Cruz, fue tanta el agua que llegando allí cayó del cielo que no pudo volver con la procesión y se quedó allí esta noche y el otro día en la ermita que allí junto está edificada; y se refiere que al paso de la procesión iba un muchacho por encima de los Caños de Carmona dando gritos y diciendo: Misericordia, Señor Nuestro.”(Abad Alonso Sánchez Gordillo)
En los últimos días ha llamado la atención la noticia de la existencia de copias de varias imágenes sevillanas. Nada nuevo bajo el sol. El Cristo de San Agustín al que se refiere el Abad Gordillo en el texto anterior era una copia que se sacaba en procesión ya que el original medieval apenas se dejaba ver en el convento. Tras la desaparición de la casa grande de los agustinos, la hermandad del Cristo de San Agustín tuvo unos años de resurgimiento en San Roque a finales del siglo XIX. Un espejismo. La gran devoción de la ciudad cayó en el olvido y acabó desapareciendo en 1936 en el incendio de la parroquia. De nuevo hoy, a los ojos de los fieles se expone una copia. La realizó Agustín Sánchez Cid y es actual titular de la hermandad de San Roque. La historia da esas vueltas...

7 comentarios:

el aguaó dijo...

Las copias siempre han estado y estarán presentes en los corrillos de cofrades. Personalmente no estoy muy de acuerdo con su realización.

Un abrazo amigo.

J. Iván Martín dijo...

Yo estoy de acuerdo con la realizacion de copias de seguridad de las imagenes, ya que son una garantia para el futuro...

Buen texto amigo rascaviejas y un abrazo.

Anónimo dijo...
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Rascaviejas dijo...

AVISO: CUIDADO CON ALGÚN VISITANTE EXTRAÑO QUE HA APARECIDO POR AQUÍ. ESCRIBE EN INGLÉS Y MUESTRA UN ENLACE. NO LO PINCHEN. ES UN ACCESO A UN ANTIVIRUS.
COSAS DEL DESTINO, YA QUE HABLÁBAMOS DE COPIAS DE SEGURIDAD...

bogar dijo...

Bueno como siempre para recordarnos que no hay nada nuevo bajo el sol, y que en esta nuestra SEMANA SANTA está todo inventado.Saludos

Lorenzo Blanco dijo...

Las copias no suponen un peligro si se saben guardar y utilizarse solo en caso de estricta necesidad.

Otro fenómeno muy peligroso son los cambiazos. De estos ha habido muchos a lo largo de la historia.

A ver si Maese Rascaviejas nos muestra algunos de la manera que acostumbra a hacerlo.

Saludos

Anónimo dijo...

Mientras no se aporte algún tipo de documentación la copia del Cristo de San Agustín no deja de ser sino una leyenda. No consta en ningún documento ni del convento ni de San Roque ni de ningún sitio. Nada se sabe de esa supuesta copia: ni quién la hizo, ni dónde estaba ni que le pasó. Cuando se produce la Desamortización y los monjes son expulsados del convento tan solo se traslada a San Roque "un" Cristo de San Agustín. Solo uno porque no había más que uno. Y cuando los enemigos de la Iglesia le prendieron fuego a San Roque desapareció la única imagen que había. La leyenda puede que venga del hecho de que la imagen no estaba siempre visible sino que a veces se ocultaba entre cortinajes en su capilla. Pero incluso sobre eso tampoco hay muchos datos. Y cuando no hay datos la imaginación se desata...

Y por supuesto, la actual imagen es única. Es simplemente la imagen que se talló para sustituir a la imagen quemada.